En 1574 el asistente de la ciudad Francisco Zapata mandó a realizar el que se convertiría el proyecto urbanístico más ambicioso de la Europa del siglo XVI: convertir la laguna de la Alameda en una plaza pública. A partir de ese momento se transformaría en un punto de encuentro de nuestra ciudad, en el lugar de la vida social y activa que ha llegado hasta la actualidad. ¿Qué hay de curioso en la Alameda?